Tras analizar la lava a escala nanométrica, los científicos estudian la utilización de sus componentes para fabricar materiales ecológicos en la bioconstrucción y otras aplicaciones. puede ser una opción para retirar la lava del volcán de La Palma.
La importancia del conocimiento que puede aportar una erupción va mucho más allá de entender mejor la dinámica eruptiva y poder prever otras con mayor antelación; también arroja luz sobre el impacto sobre los ecosistemas y la biodiversidad, sobre la agricultura o los depósitos de magma. Sin embargo, además de su impacto, la innovación ocupa un papel especial en estas investigaciones, ya que hace años que los científicos investigan nuevas aplicaciones para los residuos volcánicos, que pueden ser aprovechados como absorbentes de contaminantes, como materiales ignífugos, biomasa y como material de construcción. “No existen residuos, sino materia prima en el lugar equivocado. Ya los romanos usaban las cenizas de las faldas del Vesubio para construir”, afirma el investigador del CSIC José Luis Costa-Krämer.