El análisis de un fósil del tamaño del dedo pulgar encontrado en Valencia en los años 80 ha permitido identificar el primer caso de síndrome de Down entre neandertales, nuestros primos hermanos evolutivos, que desaparecieron hace unos 40.000 años por razones desconocidas. Los restos eran de un niño de seis años. Según los científicos que lo han identificado y analizado, este hallazgo demuestra que también ellos cuidaban de los más débiles sin esperar nada a cambio, un altruismo que se pensaba exclusivo de nuestra especie, el Homo sapiens.