Una gran bola de luz azul ha iluminado fugazmente la madrugada del sábado al domingo en distintos puntos de la Península Ibérica. El objeto atravesó los cielos a las 00:46 a mucha velocidad, unos 45 kilómetros por segundo. Comenzó su fase luminosa a unos 100 kilómetros sobre la localidad de Don Benito (Badajoz) y se extendió hasta desaparecer en el océano Atlántico, dejando una estela persistente. En medio de esta trayectoria, el bólido produjo un fogonazo de unos segundos que iluminó la noche con más intensidad que la propia luna.