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¡Prepárate para temblar! Y no, no estamos hablando de una noche fresca en la que necesitas un abrigo, sino de un miedo que te cala los huesos y que no te deja dormir por las noches. Saca la linterna, ten los ojos bien abiertos y disfruta de esta ruta llena de misterios y leyendas: 

La Torre de Londres, situada a orillas del río Támesis, frente al Tower Bridge, es la fortaleza británica más importante. La mandó construir, a finales del siglo XI, Guillermo “El Conquistador”, como su residencia real y para protegerse de futuras invasiones.

Así, entre los siglos XVI y XVII, personalidades de la realeza, de la política, de la religión y de las artes, hostiles a la Corona inglesa, fueron encarceladas allí. Además, recibieron todo tipo de torturas y fueron ejecutadas. Una de las protagonista de estas historias para no dormir es Ana Bolena. La pobre tuvo la desgracia de ser la segunda esposa de Enrique VIII. A Ana la encarcelaron y la decapitaron en la Torre de Londres. Y, desde entonces, no han dejado de correr la voz de testimonios que aseguran haber visto el fantasma de Ana, sin cabeza, pululando por la Torre.

Torre de Londres. Credit: Pexels

¿Alguna vez te has preguntado qué se sentiría al protagonizar una película de terror? Dirígete al túnel de los pies de Greenwich y pronto lo descubrirás. Este espeluznante túnel de hierro fundido discurre bajo el río Támesis y conecta la Isla de los Perros con Greenwich. Se inauguró en 1902 y desde entonces ha servido de espeluznante vía para cruzar el río. Aunque no se sabe de ningún fantasma oficial que recorra este túnel, seguro que no le gustaría encontrarse aquí solo. El túnel tiene 370 metros de largo, una iluminación insoportablemente tenue, techos con goteras y ecos de pisadas que podrían confundirse fácilmente con la parca.

El cementerio de Highgate tiene fama de ser uno de los más embrujados de Gran Bretaña. Si eso no es suficiente para provocarle pesadillas, las lápidas góticas semienterradas y las estatuas de ángeles sin cabeza pueden hacer el truco. También es el hogar de personajes famosos como Karl Marx y Douglas Adams, así como de un ghoul alto y siniestro de brillantes ojos rojos que recorre el cementerio por la noche. Incluso se han registrado encuentros con vampiros.

Según la leyenda, Sweeney Todd, el barbero asesino, tenía su barbería en Fleet Street donde cometió sus crímenes. El barbero les rebanaba el pescuezo con su afilada navaja y los lanzaba a un sótano. Después les robaba y escondía el cadáver en un antiguo túnel que había formado parte de un monasterio y que se encontraba bajo su local.

No contento con los beneficios de los robos decide sacar partido también de los cadáveres. Su amante, Margery Lovett, tenía una tienda de pasteles de carne cerca de la barbería… Así que ya te imaginas el resto. Pero la historia no les sale bien y la policía los descubre. Sweeney Todd es condenado a muerte y su amante se suicida.

La existencia de Sweeney Todd no ha sido probada. No aparece ningún documento oficial ni del juicio ni de la ejecución. La leyenda y el personaje se hicieron populares gracias a un folletín por entregas publicado en Londres en 1846. Pasó a formar parte del imaginario popular y Sweeney Todd saltó al teatro un par de años después y al cine en 1928.

Puede que no quieras vivir la vida de la suite después de escuchar esta terrorífica historia en este hotel encantado. El Langham, situado en Marylebone, fue el primer Gran Hotel de Europa y asombró por completo a la realeza europea cuando se inauguró en 1895. Fue uno de los primeros en contar con aire acondicionado, luz eléctrica y ascensores hidráulicos, por lo que acaparó mucha atención.

De alguna manera, se hizo cada vez más popular después de que empezara a haber actividad poltergeist en el hotel. Se rumoreaba que la habitación 333 era el centro de toda la actividad, y muchos valientes viajaban desde muy lejos para encontrarse con los espectros. Al parecer, un hombre vestido a la usanza victoriana tiene afinidad con la habitación, mientras que otros demonios prefieren los pasillos.

Bibliografía