La llegada de decenas de miles de extranjeros a urbes demócratas como Nueva York o Chicago radicaliza el discurso. Las encuestas muestran que este tema importa mucho más a los republicanos


María Antonia Sánchez-Vallejo
Nueva York – 01 NOV 2024 – 05:40 CET | Fuente: El País
La migración constituye un elemento clave en el discurso de Donald Trump desde 2016, cuando planteó la construcción del muro con México. Aun así, ahora más que nunca, la llegada a las principales ciudades de Estados Unidos de cientos de miles de extranjeros desde la primavera de 2022 condiciona las elecciones del próximo martes a un lado y otro del espectro político. El discurso republicano, que asocia a los migrantes con la inseguridad y los describe como vampiros de recursos escasos, como la vivienda o las ayudas para alimentos, ha arrastrado, y mucho, a los demócratas: la postura de Kamala Harris es hoy sensiblemente más dura que en la campaña de 2020. La relevancia que los votantes conceden a esta cuestión muestra, sin embargo, una brecha partidista: para el 90% de los republicanos registrados, la inmigración reviste “gran importancia”, frente al 68% de los independientes y el 50% de los demócratas, según un reciente sondeo de Ipsos/Langer para ABC News.
La imagen de caos y descontrol que proyectan los republicanos sobre lo que ocurre en ciudades demócratas como Nueva York, Chicago, Boston o Denver ha empujado a muchos políticos del partido de Harris a defender el sellado de la frontera porque a las zonas residenciales de las afueras llega ya el reflujo de centros desbordados