La humanidad ha evolucionado en muchos aspectos, y la comunicación no es la excepción. Pasamos de señales de humo y cartas manuscritas a mensajes instantáneos y videollamadas en alta definición. Esta transformación ha permitido que podamos compartir ideas y emociones al instante, lo que hubiera parecido magia para nuestros antepasados.
Sin embargo, esta evolución no ha sido lineal. Con cada avance tecnológico, también hemos enfrentado desafíos, como la pérdida de la privacidad o el exceso de información. Mientras que los primeros humanos dependían de señales físicas y lenguaje corporal, hoy nos enfrentamos al reto de transmitir nuestras intenciones a través de pantallas.
El Homo Digitalis no solo utiliza la tecnología; también está redefiniendo lo que significa estar presente. Balancear nuestras raíces humanas con las herramientas digitales será crucial para mantener la esencia de nuestra comunicación.
Estudiante de Publicidad con una gran pasión por los deportes y los animales.
