Tanto en cantidad de la lava expulsada como en superficie arrasada, la erupción de Cumbre Vieja de 2021 está siendo más destructiva que la que sufrió la Palma en 1949 pese a llevar sólo la mitad de días emanando material

Cuarenta y dos días duró la erupción volcánica más importante que había sufrido La Palma en último siglo hasta que el pasado 19 de septiembre volvió a haber actividad volcánica en la isla. En 1971, hubo otra erupción, la del volcán Teneguía, que duró 23 días pero no afectó ni a poblaciones ni a cultivos.
Lo que ocurrió durante el verano de 1949 puede ofrecer algunas pistas sobre cómo podría ser la evolución de la actual erupción en el parque de Cumbre Vieja, que en los 21 días que lleva en marcha ha superado ya la superficie arrasada durante el episodio ocurrido hace 72 años, conocido como la erupción del volcán del Nambroque (por la zona en la que se originó) o de San Juan, pues empezó a rugir a las 11 de la mañana del 24 de junio, día de San Juan. Detuvo su actividad de forma repentina pero la retomó cuatro días después y ya no paró definitivamente hasta el 4 agosto.
Hasta ahora, el volcán de Cumbre Vieja sólo ha dejado de emitir material durante unas horas. Ocurrió el pasado 27 de septiembre pero esa misma tarde, reanudó su actividad de forma más intensa. Estos parones imprevistos e impredecibles son habituales, según los vulcanólogos, y no significan que el final de la actividad volcánica esté cerca.
El pasado jueves vimos como en su camino hacia el mar, la lava llegaba a la fajana o delta lávico que se creó en 1949, entre la playa de Los Guirres y El Charcón. Un terreno que ha sido utilizado durante estas décadas para cosechar plátanos pues los suelos volcánicos son muy fértiles.