El caballito de mar en el Mar Menor: Importancia y conservación

En esta página encontrarás información sobre la biología del caballito de mar, las amenazas que enfrenta y los esfuerzos de conservación para protegerlo.

El Hippocampus guttulatus, emblema del Mar Menor, ha pasado de ser una especie abundante a un símbolo de la crisis ecológica de la laguna. Su morfología única y su sistema de reproducción (donde los machos gestan a las crías) lo convierten en un tesoro biológico. Sin embargo, desde 1990, su población ha colapsado un 90% debido a la sobrepesca, la degradación de praderas marinas y la proliferación de medusas. En este artículo, exploramos cómo la ciencia y la conservación intentan revertir su extinción.

  1. ¿Qué son?

Los caballitos de mar (género Hippocampus) son un grupo popularmente conocido, que suscita gran interés a desde el punto de vista científico. Esto probablemente, sea debido a que poseen una morfología y una biología bastante particulares, con un sistema de reproducción y cuidado de la prole muy especial.

Por desgracia, en las últimas décadas, las poblaciones de Hipocampos, han sufrido un evidente retroceso, no solo en nuestras latitudes, sino también a nivel mundial. A esto contribuyen diversas causas, como son la explotación directa para uso comercial, la pesca accidental o perturbaciones de sus hábitats.

Actualmente, la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (I.U.C.N)reconoce una especie de caballito de mar como amenazada (Hippocampus capensis, Boulenger 1900), nueve vulnerables (de las cuales se tienen datos o fuertes sospechas de que la población se encuentra bajo amenaza). El resto de las especies, se mantienen sin calificar debido a la falta de datos.

Caballito de Mar

La convención para el comercio internacional de especies amenazadas, cataloga las especies en tres apéndices según el grado de protección que se considera necesario para cada una de ellas. En noviembre de 2002, la conferencia decide incluir todas las especies de caballitos (género Hippocampus) en el apéndice II.

Ésta medida entró en vigor en mayo de 2004.

La especie que tradicionalmente ha sido encontrada en el Mar Menor es Hippocampus guttulatus. En las últimas décadas, la población de caballitos ha sufrido un gran descenso, coincidiendo con el desarrollo urbanístico de la zona.

Hay varios factores que se barajan como influyentes en esta regresión.
Por una parte, la sobrepesca, que incluye tanto a la captura accidental en las redes de los pescadores, como a las intencionadas, ya sea para utilizarlos como componente de la medicina tradicional china, o bien como objeto decorativo, tras un proceso de secado al sol.
Asimismo, las larvas de pequeño tamaño, tras salir de la barriga de sus padres, se integran en las corrientes como parte constituyente del plancton. La proliferación de medusas en aguas del Mar Menor en los últimos años puede haber afectado a la fase larvaria de H. guttulatus, ya que determinadas especies de medusa centran su alimentación en mayor o menor grado en el plancton.
Por otra parte, la degradación de las praderas vegetales, en la laguna afectan negativamente a la recuperación de la especie.
Como consecuencia del estado actual de la población de caballito en el Mar Menor, los vistosos hipocampos se integran desde hace tiempo en el libro rojo de vertebrados en peligro de la Región de Murcia.

H. guttulatus, vive en poblaciones de relativamente baja densidad, que se encuentran muy arraigadas a una determinada zona, por tanto, son muy dependientes del medio en el que habitan. En el caso de H. guttulatus, las poblaciones están muy ligadas a la cobertura vegetal. Por este motivo, la evaluación de estas poblaciones parece ser un buen índice para la valoración del entorno en el que aparecen.

2. ¿Por qué desaparece?

Disfrutar de un baño rodeado de caballitos de mar era una actividad única de la que se podía disfrutar en la manga del Mar Menor. Sin embargo, la proliferación urbanística en Murcia y otros problemas medioambientales, han ido desgastando el mar y poniendo en peligro a las especies que hasta entonces habitaban allí y de las que ya no queda ni rastro.

En 2012, Hippocampus, una asociación de buzos voluntarios comenzó a realizar un censo en el que contabilizó más de 195.000 ejemplares, pero ahora, la situación ha cambiado por completo. «Desde que empezamos el estudio hemos visto una reducción del 99,9% de la población de caballitos de mar», explican a Atlas miembros de la asociación.

En 2020 los buzos avistaron un total de 1.250 caballitos de mar, dos años más tarde, en 2022 la cifra se reducía hasta los 800. No obstante, el dato mas alarmante llegaba en verano de 2023 cuando los buzos no fueron capaces de avistar ni un solo ejemplar en la zona.

Los expertos sitúan el origen del problema en 2019, momento en el que afirman que se generaron procesos de toxicidad en el fondo marino por la pérdida de cobertura vegetal que se sufrió en el Mar Menor debido a la entrada de nitratos procedentes de la agricultura de regadío y agravadas por las gotas frías. Además, los cambios en el ecosistema han favorecido a la llegada de depredadores haciendo que el caballito de mar quede en vías de desaparición.

Ante esta situación, desde Cruz Roja insisten en la concienciación medioambiental a nivel nacional pues, en ocasiones, los bañistas no son consientes de la realidad que acecha a los mares. Desde Hippocampus luchan por incluir a este animal dentro del Catálogo Español de Especies amenazadas, pues una vez dentro, las Comunidades Autónomas en las que haya presencia de caballitos de mar, estarán obligadas a llevar a cabo un plan de conservación y de recuperación de la especie. 

Más información sobre la desaparición

3. Asociación Hippocampus

La Asociación Hippocampus es una organización sin ánimo de lucro dedicada a la protección del Mar Menor y su especie más icónica: el caballito de mar de hocico largo (Hippocampus guttulatus). A través de investigación científica, proyectos de conservación activa y programas de voluntariado, trabajan para combatir amenazas como la contaminación por plomo en fondos marinos. Una iniciativa destacada es su Proyecto Plumbum®, que ya ha retirado cientos de kilos de este metal tóxico. Si quieres conocer cómo participan en la recuperación de este ecosistema único o unirte a sus actividades, descubre más sobre su labor en nuestro artículo.

4. Actividad científica

La conservación de los caballitos de mar (Hippocampus spp.) es un desafío que combina ecología, tecnología y compromiso social. Estas criaturas, emblemáticas por su morfología única y su delicado equilibrio en los ecosistemas costeros, enfrentan amenazas críticas como la pérdida de hábitat, la contaminación y la sobrepesca. La ciencia se ha convertido en un pilar fundamental para revertir su declive, mediante investigaciones innovadoras que no solo diagnostican las causas de su desaparición, sino que también diseñan soluciones basadas en evidencia.

En el Mar Menor, por ejemplo, el Hippocampus guttulatus ha perdido más del 90% de su población en tres décadas. Para abordar esta crisis, proyectos científicos como el de nuestra propia Región fomentan el estudio y el seguimiento de las poblaciones de caballitos de mar en el Mar Menor(más info aquí).

Por otro lado, se encuentra la iniciativa de El Acuario de la Universidad de Murcia (UMU), que comenzó hace cinco años para conservar el caballito de mar, siendo uno de sus objetivos conocer si estos caballitos tienen la variabilidad genética que había en el Mar Menor antes de la Dana de 2019, lo que asegura una mejor resistencia de la especie contra fenómenos adversos y mucha más información aquí.

La ciencia también impulsa iniciativas de restauración ecológica: estudios sobre las praderas de Cymodocea nodosa revelan cómo estas plantas marinas actúan como guarderías naturales para los caballitos jóvenes. Con estos datos, organizaciones como la Asociación Hippocampus han replantado hectáreas de fondos degradados, creando refugios seguros para la especie. Además, la colaboración internacional entre investigadores permite compartir metodologías exitosas, como el marcaje con microchips para rastrear migraciones o el análisis de patrones de corriente que afectan a las larvas.

Estos esfuerzos no solo buscan salvar a una especie carismática, sino preservar la salud integral de los ecosistemas marinos. Cada avance científico es un paso hacia un futuro donde los caballitos de mar no sean solo un recuerdo, sino símbolos de resiliencia y coexistencia sostenible.

El Hippocampus guttulatus no es solo una especie carismática: es un termómetro de la salud del Mar Menor. Su recuperación requiere restaurar praderas marinas, frenar la eutrofización y apoyar proyectos como el de la UMU. Tú decides: ¿Será el caballito de mar un recuerdo del pasado o un símbolo de resiliencia?

El caballito de mar es una especie clave en el equilibrio del ecosistema del Mar Menor, pero enfrenta amenazas como la contaminación, la pesca y el deterioro de su hábitat. La investigación y los esfuerzos de conservación son fundamentales para su supervivencia. Cada acción cuenta: desde la educación ambiental hasta el apoyo a iniciativas de protección. Juntos, podemos ayudar a preservar esta especie única y su entorno.

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