Mientras el Gobierno de la Región de Murcia sostiene que la incidencia de las infraestructuras portuarias en la laguna salada es «nula», científicos y vecinos advierten sobre la grave degradación que provocan en el ecosistema. Esta situación se agrava con el reciente avance legislativo impulsado por el PP y Vox para modificar la Ley del Mar Menor en el Parlamento murciano.
Densidad de puertos y su impacto en el ecosistema
En el Mar Menor coexisten once infraestructuras portuarias, construidas durante el auge del turismo en los años 70 y 80. Según Juan Manuel Ruiz, investigador del Instituto Español de Oceanografía (IEO), «esa densidad de puertos es un verdadero disparate» debido a su impacto en la dinámica litoral y la biodiversidad. Los puertos de Los Nietos y Los Urrutias destacan por su fuerte deterioro ambiental, afectando tanto a las playas como a la vida cotidiana de los habitantes.
Los Nietos: un «monstruo» ecológico
El Club Náutico de Los Nietos, con casi 300 barcos amarrados, ejemplifica los problemas de diseño que alteran la circulación natural del agua. La acumulación de sedimentos ha reducido la profundidad de áreas que originalmente superaban los dos metros, generando zonas estancadas con altos niveles de metales pesados y materia orgánica en descomposición. Según Ruiz, «es un ejemplo de libro del deterioro causado por estas infraestructuras».

Los Urrutias: un puerto sobre un humedal
Construido en 1986 sobre un saladar ahora protegido por la Red Natura 2000, el puerto de Los Urrutias ha interrumpido el flujo natural de agua, favoreciendo el estancamiento y la acumulación de fango. Los residentes, como Ana Pineda, denuncian la falta de acción gubernamental: «Este puerto se construyó en un humedal y ahora el agua está contaminada y estancada».

Los Alcázares: playas convertidas en zonas de amarre ilegal
En Los Alcázares, la playa de La Concha se ha transformado en un área de fondeo ilegal debido al alto coste de los amarres oficiales. Esto provoca la degradación del fondo marino y la pérdida de calidad del agua, afectando el uso recreativo de la playa.

La falta de acción institucional
A pesar de la evidencia científica, la Consejería de Fomento sostiene que la afección de estos puertos a la dinámica litoral es «nula», basándose en estudios que no consideran la acumulación de sedimentos y la degradación del ecosistema. Organizaciones como el Pacto por el Mar Menor critican esta postura, calificándola de «un insulto a la razón y la inteligencia».
Reacciones y demandas
Organizaciones como el Pacto por el Mar Menor exigen:
- Estudios de impacto ambiental independientes para evaluar el efecto real de estas infraestructuras.
- Modificaciones en las infraestructuras portuarias antes de renovar concesiones, en línea con la Ley 3/2020 de Recuperación y Protección del Mar Menor.
- Revisión de las concesiones portuarias existentes, considerando su impacto ecológico y social.