Es complicado recoger la repercusión de la técnica Graham y gran influencia que ha tenido la bailarina y coreógrafa, pues esta no solo se limita al panorama de la danza, sino que cambia la perspectiva sobre el arte de muchas personas.
Por su dirección han pasado figuras de la danza como Alvin Ailey, Twyla Tharp, Paul Taylor, Merce Cunningham, Rudolf Nureyev, Mikhail Baryshnikov, Margot Fonteyn, Anna Sokolow, Pearl Lang, Sir Robert Cohan, Donan McKayle, Elisa Monte, Jacquelin Buglisi o Maya Plisetskaya.
No solo a bailarines se limita su enseñanza, ya que en sus peores momentos económicos impartió clases de gesto a actores, con figuras como Bette Davis, Gregory Peck, Kirk Douglas, Liza Minelli, Tony Randall, Anne Jackson, Joanne Woodward o Claire Bloom. De mismo modo, a su camerino han acudido personas como Charles Chaplin y su mujer Oona, el mismo Woody Allen, o Eleanor Roosevelt, con la que mantenía una gran amistad. Hasta Madonna se viste como ella en Lamentation sesenta años después para una sesión de fotos y siendo ella una representación más de la influencia que tuvo Graham.
Es la responsable, entre muchos otros, de crear la rama de danza en la Escuela Julliard. Su expansión llega hasta países como Israel, donde junto a la heredera Betshabée de Rothschild, amiga cercana, funda en 1965 Batsheeva Dance Company, que sigue funcionando a día de hoy como un referente para la danza contemporánea, dirigida por el creador del lenguaje Gaga, Ohad Naharin. La escuela que fundó para enseñar su técnica es en el presente la más longeva activa de la historia de los Estados Unidos y la única donde se imparte de forma profesional técnica y repertorio.
Es innegable que cambió todo el panorama de su momento y también el que vino más tarde, y por eso se la denominó la bailarina del siglo (XX) y es llamada la Picasso de la danza.
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